Burdo acto de intimidación
Publicado el agosto 1, 2011, Bajo Nacional, Autor Axiel.
Contra el padre Alejandro Solalinde en Puebla / Las policías municipal y estatal montan un impresionante operativo para detener al defensor de los derechos de los migrantes y a sus dos escoltas / Intervienen el gobierno de Oaxaca y la CNDH para lograr la liberación del prelado y sus guardianes
Tomado de Por Esto!
PUEBLA, Puebla, 31 de julio (EL UNIVERSAL y APRO).- El padre defensor de los derechos humanos, Alejandro Solalinde, fue retenido por policías municipales de Puebla a donde arribó este domingo en la caravana pro migrantes Paso a Paso hacia la Paz. El sacerdote fue cuestionado, luego de que unas 10 patrullas realizaron un operativo en la zona de la Parroquia de la Señora de Nuestra Asunción, por las armas largas que portaban sus escoltas.
“Tengo mucho coraje porque desde antier se coordinaron las autoridades de Oaxaca y Puebla y ahora salen con esto, no me siento bien”, abundó.
Declaró que sólo hasta que intervino la Comisión Nacional de Derechos Humanos y el gobierno de Oaxaca, los liberaron.
Consideró que esto es un burdo acto de intimidación porque lo interrogaron como un delincuente.
“¿Quién es? Identifíquese, ¿a qué se dedica?” Fueron las preguntas pese a que les explicó que los policías que lo escoltan le fueron asignados porque la CIDH le otorgó medidas cautelares por las constantes amenazas que ha recibido al denunciar los secuestros masivos de migrantes centroamericanos, las, extorsiones, asesinatos y reclutamiento que realiza el crimen organizado. Dos elementos de la policía oaxaqueña que cuidaban del sacerdote fueron trasladados en calidad de presentados ante el Ministerio Público de Puebla, de donde fueron liberados una hora después.
El padre Solalinde arribó a la capital poblana acompañando a más de 300 migrantes y de su escolta, misma que portaba las armas largas con sus respectivos permisos luego de que éstos fueran autorizados por las amenazas que ha recibido el párroco.
Según versiones de algunos de los migrantes centroamericanos de la caravana, los policías cuestionaron a Solalinde de una forma brusca y hasta agresiva. Además lo retuvieron por el lapso aproximado de 30 minutos.
Argumentaron que una llamada ciudadana alertó sobre la presencia de personas con armamento, por lo cual enviaron varias patrullas y camionetas.
Pese a estos hechos, Solalinde pudo ofrecer una misa en la parroquia donde los migrantes pasaron la noche para dirigirse este lunes hacia la Ciudad de México y así culminar la caravana.
La Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal excusó que los policías oaxaqueños fueron traslados a las instalaciones de la Secretaría por “protocolo” a fin de que se mostrara la documentación que respalda su portación.
El ayuntamiento aseguró que Solalinde acudió “de forma voluntaria” al ministerio.